¿Qué es la climatización geotérmica?
Todos nosotros soñamos con una vivienda cómoda y acogedora, cálida en invierno y fresca en verano.
Por lo general, para la calefacción de la vivienda unifamiliar suelen aplicar las fuentes de energía tradicionales: gas natural, gasóleo, carbón o electricidad.
Sin embargo, la inestabilidad de los precios de este tipo de combustibles y la situación ecológica del medio ambiente nos obligan a cambiar el sistema energético. De hecho más de la mitad de emisiones de dióxido de carbono en la Unión Europea proviene del proceso de climatización del sector residencia, lo que nos hace mirar hacia energías renovables como la geotermia.
Hoy en día, el uso de combustibles fósiles sigue siendo una de las soluciones populares en nuestro país. Pero las energías alternativas entran en nuestra vida con el paso cada vez más decidido.
En este artículo nos gustaría hacerles conocer los sistemas innovadores de la climatización o sea sistemas de climatización geotérmica para las viviendas unifamiliares.
El uso de la energía geotérmica es una buena opción para reducir los efectos nocivos en el medio ambiente que provienen del consumo de carbón, gas y petróleo. Es una alternativa eficiente y rentable al sistema tradicional.
Explicar de una manera fácil qué es un sistema de climatización geotérmica
El principio del funcionamiento del sistema geotérmico es parecido al de un frigorífico pero a la inversa: el fluido frigorífico (el evaporador) absorbe el calor extraído de la tierra; el compresor comprime el gas para elevar su temperatura; el condensador cede el calor al emisor y la válvula de expansión expande el gas otra vez frío para que pueda absorber el calor de la tierra.
En este caso hay que decir que la temperatura de la tierra a partir de pocos metros de profundidad se mantiene constante – entre 7ºC y 14ºC, lo que permite el funcionamiento del sistema durante todo el año con el elevado rendimiento.
Avances en Geotermia
Nuevas tecnologías de bombas de calor geotérmicas permiten convertir el calor subterráneo en el calor apto para el calentamiento de los edificios.
El desarrollo de sistemas de climatización geotérmica empezó como consecuencia de la crisis energética desde hace más de 30 años.
Inicialmente en los EEUU y en los países del norte de Europa. Al principio este tipo de sistemas de climatización tenía el coste muy elevado y se instalaban sólo en las viviendas de lujo, algo que también se producía con la otra fuente alternativa de energía, la biomasa.
Sin embargo, con el desarrollo de la tecnología de producción, el precio de los sistemas geotérmicos se ha disminuido y aunque geotermia sigue siendo una de las opciones más caras, teniendo en cuenta los beneficios y el ahorro que podemos conseguir con geotermia, ahora es uno los sistemas de climatización accesibles para los consumidores.
Los modelos de bombas de calor sufren constante modernización que permite hacerlas todavía más eficientes y rentables.
En el año 1980 los Estados Unidos contaban con alrededor de 3 millones de bombas de calor, Japón con más de medio millón, los países europeos con 150 mil, con el número de máquinas en constante crecimiento.
Para el año 1993 en los países de Europa se utilizaban más de 12 millones de bombas de calor. Hoy en día, en todo el mundo cada vez más personas están optando por la climatización geotérmica, como un sistema eficaz y rentable, y el motivo por el qué utilizar la energía geotérmica es claro.
La fuente con la que funciona el sistema geotérmico es renovable e inagotable.
Para calentar y enfriar la vivienda se usa el calor de la tierra. El sistema no contamina la atmósfera con emisión de gases de efecto invernadero, permite crear comodidad y condiciones óptimas de confort en el hogar.
Debido a lo que la bomba de calor no utiliza ningún tipo de combustible, los sistemas geotérmicos son seguros y no tienen riesgo de incendio o explosión.
No requiere ningún tipo de chimeneas y campanas extractoras, ocupa poco espacio, es silencioso y no emite olores desagradables ni gases nocivos.
A diferencia de los sistemas de calefacción de combustibles fósiles (líquidos o sólidos), el sistema geotérmico no necesita espacio para el almacenaje: la energía térmica de la tierra es inagotable y está presente durante todo el año las 24 horas al día.
No produce ningún impacto visual en la vivienda si el emisor es suelo radiante/refrescante.
Además, la instalación de una bomba de calor geotérmica permite calentar la casa en invierno y refrescarla en verano con el mismo equipo.
El aspecto económico
La instalación del sistema geotérmico es más cara que la instalación de caldera de gas o gasóleo o el sistema de aire acondicionado.
Sin embargo, la bomba de calor consume menos energía lo que abarata considerablemente el proceso de su explotación: 1 kW de energía eléctrica consumida por la bomba de calor geotérmica se convierte en 3-5 kW de energía térmica en modo calefacción y un poco menos en modo refrigeración.
El sistema geotérmico enfriará la vivienda en verano, calentará en invierno, producirá el agua caliente sanitaria, calentara el agua de la piscina dando una resolución completa de climatización.
El principio de funcionamiento de la bomba de calor siempre es el mismo y no depende del fabricante. Se varían el diseño del equipo, el tamaño y la potencia.
La bomba de calor puede funcionar durante más de 30 años, sin necesidad de mantenimiento frecuente.
Hay dos tipos de captación de la energía geotérmica: Vertical y horizontal.
- La captación vertical puede ser de dos tipos: de bucle abierto y de bucle cerrado; consiste de una o varias perforaciones entre los 80 y 150 metros de profundidad en las que se introducen las ondas para transmitir el calor de subsuelo.
- La captación horizontal es un sistema de colectores horizontales enterrado de 0,8 a 1,2 metros de profundidad por los que circula el agua glicolada.
Independientemente del tipo elegido de la captación, la bomba de calor funciona de forma estable y no produce oscilaciones de temperatura y humedad en el interior del cuarto técnico.
El sistema de climatización geotérmica se complementa de forma más eficiente con el sistema de suelo radiante/refrescante.
Las ventajas de esta combinación es que el calor se distribuye uniformemente por todo el suelo, ya que la temperatura del líquido de los tubos del suelo radiante no suele superar los 35 grados, pero este sistema permite conseguir un óptimo confort con 2 grados menos que supone también un ahorro para el propietario de la vivienda.
La climatización geotérmica es una solución óptima: ofrece el confort y protege el medio ambiente.