El problema de aprovechar la energía de la biomasa
Con la continua preocupación de que los combustibles fósiles, como la gasolina, el petróleo y el carbón, desaparecerían, se ha buscado durante varios años su sustitución. Biomass Power ha estado en el planeta desde su inicio. Se ha utilizado a lo largo de los años, desde la época de los cavernícolas, sin embargo, su potencial de aplicación a la energía necesaria en el mundo actual no se realizó hasta la década de 1970.
Los científicos han intentado muchas vías diferentes de enfoque para tratar de determinar cómo aprovechar este poder de una manera que sea barata y aplicable utilizando el equipo moderno de hoy en día. Con la preocupación por los gases de efecto invernadero y las emisiones nocivas al aire que respiramos, el ritmo se aceleró para encontrar una alternativa. La importancia y el potencial de la biomasa finalmente llegó al frente de toda exploración
Hubo muchos resultados favorables de la investigación en esta área. Se descubrió que había muchos productos disponibles y que podía desarrollarse como un cultivo agrícola. No había duda sobre su poder para satisfacer las necesidades energéticas de la industria.
El gobierno se interesó en el uso de la biomasa en la década de 1980, cuando la Oficina de Evaluación de Tecnología estableció que había un gran potencial en esta área. En la búsqueda constante de una fuente de energía renovable, se contrató a varios científicos para que trabajaran en este campo. Se publicaron numerosos informes y se discutieron las posibilidades.
Fue en los años 2000 cuando el gobierno se puso en primer plano y desarrolló un programa para emplear biomasa utilizando el método de co-combustión. En aquel momento esa idea no fue aceptada con mucho entusiasmo y, a pesar del dinero gastado, fue abandonada. Actualmente, esta idea está de vuelta y se está aplicando, con éxito, en algunas partes de los Estados Unidos, así como en el mundo.
Existe un amplio consenso en que el potencial de la energía de la biomasa es ilimitado una vez que se ha desarrollado un método de procesamiento barato. En la actualidad, en productos como el etanol, el coste de producción es considerablemente mayor que cualquier ahorro obtenido por el resultado final. Aunque reduce las emisiones nocivas a la atmósfera, al intentar convertir los métodos actuales, va a costar al consumidor mucho más dinero que el que se está utilizando actualmente.
En la actualidad, hay planes para la construcción de varias plantas para hacer esta conversión de productos orgánicos a etanol, así como plantas para convertir estiércol y otros productos similares a metano. Sin embargo, hasta que no se determine cómo hacer esto de manera económica, no será aceptado universalmente. El objetivo final, producir energía a partir de un producto natural y proporcionar un ambiente saludable es sin duda admirable, pero va a hacer falta mucha más investigación para llegar a un plan que sea viable en el mundo de hoy.
Desde hace mucho tiempo se reconoce la eficiencia energética de la energía solar, como se ha demostrado en los paneles solares y otras aplicaciones actualmente en uso. Dado que los productos orgánicos contienen energía solar, se deduce que la potencia de los productos de energía solar apenas está empezando a ser investigada. Por lo tanto, uno puede estar seguro de que cuando se revele y se aplique el secreto de liberar realmente el poder de la biomasa, esto beneficiará enormemente al mundo entero.